España tiene el privilegio de estar entre los países que cuentan con un mayor número de inscripciones en la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, un reconocimiento universal que se otorga a los bienes que poseen un valor excepcional y cuyo disfrute, protección y cuidado pasa, por medio de esta distinción, a ser reconocido por todos los pueblos del mundo, independientemente del territorio en el que estén localizados.
De entre los 46 bienes españoles incluidos en esta Lista, destacan las 15 Ciudades Patrimonio, que reúnen un extraordinario legado cultural, único en el mundo. Ciudades que resumen lo mejor de las distintas civilizaciones que a lo largo de los siglos han habitado la península y sus archipiélagos, impregnándolas con su historia, su arquitectura y sus costumbres.
España es el país que tiene más ciudades en la lista mundial, que fue inaugurada por Alcalá de Henares y Santiago de Compostela, a las que siguieron Ávila, Baeza, Cáceres, Córdoba, Cuenca, Ibiza, Mérida, Salamanca, San Cristóbal de la Laguna, Segovia, Tarragona, Toledo y Úbeda. Son ciudades geográficamente distantes y culturalmente diferentes, una muestra de la diversidad de España.
El grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad (GCPHE) va a celebrar sus 25 años de existencia con un gran abanico de actividades y promocionándose en las grandes ferias de turismo del mundo como Frankfurt o ITB de Londres, pero sin olvidar las ferias turísticas de Utrecht, Bruselas, Hamburgo, París, Berlín, Lisboa, Singapur, Tokio y Buenos Aires. Quieren ser atractivas a mercados de origen como Milán, Ámsterdam, Moscú, Berlín, Chicago, Oporto o París.
Entre las actividades previstas para 2018, destacan la asamblea estraordinaria de Ávila, presidida por el rey, actos simultáneos, en la noche del patrimonio (15 de septiembre) y un concierto conmemorativo el 16 de junio en la Plaza de la Universidad de Alcalá, a cargo de la Orquesta Sinfónica de Escuela Reina Sofía. Además han previsto la edición de una guía sobre cultura gastronómica de las 15 ciudades, potenciar el programa pedagógico «Aula de Patrimonio», dirigido a centros educativos, un certamen audiovisual de cortos con teléfonos móviles para jóvenes y pruebas deportivas que recorrerán los espacios más emblemáticas de cada ciudad.
El grupo, que nació en 1993, recuerda que la cooperación entre ellas no resta personalidad a ninguna de estas ciudades y reconocen que la riqueza de sus conjuntos históricos estriba en su individualidad. Ciudades monumentales pero al tiempo vivas, poseedoras de un especial e inigualable estilo de vida que las hace distintas y tan atractivas a los viajeros que se asoman a sus tesoros.
La celebración del vigésimo quinto aniversario coincide con la declaración del Año Europeo del Patrimonio cultural. Para la alcaldesa de Córdoba, y presidenta de turno del GCPHE, «esa coincidiencia nos permite subrayar que el patrimonio es de todos los ciudadanos, es una oportunidad para conservar, apreciar y ponerlo en valor». Isabel Ambrosio, explica a 4Dinfonet que «esa coincidencia nos permite aprovechar algunos de los actos dentro del marco de esa celebración». Ambrosio añade que «el objetivo es el mismo, ser conscientes de que ese tesoro que tienen las ciudades, esa responsabilidad de la conservación de una herencia que nos han legado las distintas civilizaciones que han pasado por cualquiera de nuestras ciudades, está en plena vigencia y ha de mirar al futuro».