Los países europeos con mayoría ortodoxa celebran una de las navidades más frías que se recuerdan. Le llaman la epifanía helada. Rusia, Bulgaria, Moldavia, Grecia, Serbia, Montenegro o la República de Macedonia, tienen en general temperaturas 20 grados más bajas de lo habitual en esta época del año. Media Europa está congelada. Una situación insólita que muestra la fuerza de esta temporal de frío polar, que recorre el continente desde Finlandia y Rusia hasta la península Itálica o el Atlántico.
La masa de aire ártico está afectando también a Turquía, Croacia e Italia, provocando graves problemas en las conexiones aéreas, marítimas y terrestres. El aeropuerto de Estambul, uno de los enlaces más importantes del sureste europeo, está paralizado y se han tenido que cancelar más de 500 vuelos. La compañía áerea Turkish ha tenido que ubicar en hoteles a más de 15.000 pasajeros, unos 10.000 que intentaban llegar a Estambul y otros 5.000 que no han podido volar debido a las pésimas condiciones meteorológicas. Se han cerrado los estrechos del Bósforo y los Dardanelos y no zarpan los ferries que unen la ciudad. Una situación similar se produce en los más importantes puertos del Mediterráneo central, principalmente en Grecia, los Balcanes e Italia.
El frío, la nieve y las bajas temperaturas afectan también a la circulación viaria. El hielo en las carreteras se convierte en un enemigo invisible. Uno de los peores accidentes se ha producido en Francia, donde han muerto 4 portugueses que se dirigían a Suiza. El autobús ha patinado y se ha salido de la calzada. En muchas carreteras se han producido varios accidentes, este sábado se habían contabilizado más de 200 en Holanda. También el Danubio se ha helado parcialmente, a su paso por Budapest, dificultando la navegación fluvial.
En Polonia el termómetro ha descendido a 27 grados bajo cero y han llegado a -19 en Croacia. En Polonia una estación meteorológica del sur ha marcado casi 40º bajo cero y en Moscú han rozado esa temperatura. Un moscovita deja clara la situación «Seas ruso o no, el frío es el frío», mientras que otra ciudadana polaca, asegura que «a pesar de que voy muy abrigada, sigo notando mucho frío, pero hay que llevarlo siempre con una sonrisa en la cara».
La nota más grave de este frío polar es la muerte por hipotermia de unas 30 personas, la mayoría en Polonia e Italia. Con temperaturas rondando los 26 grados bajo cero en muchos países, los que más están sufriendo la situación son los vagabundos. La policía polaca los busca entre las viviendas abandonadas «Estamos patrullando en las áreas que ellos frecuentan habitualmente para trasladarlos a centros hospitalarios y pedirles que vayan a refugios más seguros», explica un portavoz policial. En Rumanía también intentan convencerles de lo peligroso que es que duerman al raso, aunque muchos rechazan ir a albergues sociales…. En Roma, han abierto algunas estaciones del metro por la noche y los responsables de servicios sociales reparten bebidas calientes, entre los que no quieren desplazarse a los albergues. El papa Francisco se ha referido a las dificultades de las personas que viven en la calle y ha pedido que se abran los dormitorios públicos del Vaticano, para acoger a estas personas.
En Grecia, donde han muerto dos personas, los refugiados que se han quedado en Lesbos están sufriendo las bajas temperaturas. Las tiendas de campaña en las que viven unas 6.000 personas, están llenas de nieve, o tumbadas a causa de su peso. «A veces, explica un hombre, cuando el viento sopla muy fuerte tira las tiendas y no podemos dormir, casi no tenemos nada para calentarnos». Una situación que se repite en una vieja fábrica abandonada de Serbia, donde hay unos mil refugiados que reciben alimentos calientes de una ONG.
El aire polar ha afectado también al centro-sur de Italia, especialmente a los Apeninos. Las zonas devastadas por los terremotos, en los Abruzzos han sufrido la caída drástica de las temperaturas, complicando aún más la situación de muchos vecinos. En Roma, las bajas temperaturas han helado las fuentes de Trevi, Navona y el Vaticano, y en el interior del país los ganaderos y agricultores están preocupados porque los animales no tienen comida y se les han helado las hortalizas.
Las drásticas condiciones meteorológicas también afectan a muchos ciudadanos que se han quedado sin luz , sin calefacción o sin agua, con temperaturas bajísimas. Los meteorólogos señalan que la situación irá mejorando en algunos puntos, pero mantienen la alerta hasta el miércoles. Algunos gobiernos locales y nacionales han avisado a los ciudadanos de los peligros de salir a la carretera y piden que no conduzcan si no es estrictamente necesario.