El low cost se instala en el turismo europeo

El mundo del turismo vive desde hace años una revolución. La cultura low cost se ha instalado en los hábitos turísticos de los europeos, permitiendo ahorrar costes a los viajeros, sin renunciar a viajar y conocer otras ciudades cercanas, a tan solo unas horas de distancia. Además este recurso económico ha potenciado el europeísmo, ya que permite conocer al resto de conciudadanos de la Unión Europea sin grandes dispendios.

Los vuelos, los trayectos cortos y las compañías aéreas low cost, facilitan que el turismo entre países europeos, sea tan normal habitual como viajar en coche o en tren de una provincia a otra. La presencia de compañías que realizan viajes a precios bajos, y con importantes restricciones para el usuario, ha llevado a las aerolíneas bandera a tener sus propias marcas de bajos precios. Un sistema que ha permitido conocer sobre todo la Europa Central y del Este, que, hasta ahora, eran bastante desconocidas para el público en general.

Otra modalidad para llegar al lugar deseado es compartir un coche o viajar en autobuses low-cost que ofrecen precios muy competitivos entre capitales o ciudades comunitarias. Jurídicmente el menos controlado es ponerse en contacto con personas que hacen un mismo recorrido y una de ellas pone su vehículo, para compartir gastos.

Alojarse en casas particulares se ha
convertido en una alternativa a los hoteles, apartamentos y hostales de toda la vida. El sector hotelero tradiconal lo critica por ser una «economía turística sumergida», pero lo cierto es que ha venido para quedarse y Europa es uno de los continentes con más oferta, principalmente por su seguridad y su legislación, que permite pocas sorpresas tanto al inquilino como al anfitrión. En España, por ejemplo, su uso se ha disparado casi un 30% en los últimos cinco años. Airbnb es el portal más importante especializado en este tipo de turismo

Aunque muchos han empezado a regular las plataformas peer to peer (particular a particular), es un turismo que está cada vez más en auge, facilita al viajero un ahorro importante y potencia un turismo sostenible. Otro modelo es la economía colaborativa, centrada principalmente en el intercambio de casas, lo que supone que personas de todos los países ponen a disposición sus hogares durante tiempos pactados de tiempo a cambio de ir a casa de otra familia. Una relación basada en la confianza y que permite, como el peer to peer convivir por unos días en un barrio concreto de una ciudad distante a centenares de kilómetros de tu casa. El intercambio de sofás, es otra fórmula, que permite a los usuarios conocer a sus anfitriones.

Y cuando ya estamos en el lugar de destino, podemos contratar los free tours, nombre no real del todo, que muestran diferentes ciudades europeas sin precio fijado, en el que al acabar el recorrido los turistas entregan el dinero que consideran adecuado o no entregan nada.

Internet, la crisis económica y sobre todo la gran movilidad de los jóvenes ha potenciado este tipo de turismo, que para muchos poco tiene que ver con el confort y los servicios que ofrecen los hoteles, las aerolíneas tradicionales o los trenes turísticos, aunque tengan un precio más caro. Lo cierto es que estas nuevas modalidades han permitido que unos puedan viajar mirando el bolsillo y otros prefieran la comodidad aunque les cueste más caro. A poco que uno sepa buscar, cada día podemos sorprendernos por las ofertas. Por ejemplo, se puede volar de Barcelona a París por 1 euro, o elegir entre 1.000 hoteles en Londres en menos de un minuto, o para las fechas de Navidad y Año Nuevo descubrir que hay hoteles en Roma por 32 euros la noche… No se trata de las clásicas ofertas “desde”, son propuestas concretas que el avanzado buscador Jetcost ofrece en su página web y a las que cualquier puede acceder. Solo hay que buscar origen y destino, poner la fecha y dejar que el buscador trabaje y seleccione lo mejor que hay en cada momento. La mayoría de los buscadores no venden, solo ofrecen lo que encuentran que se contrata directamente. Tanto en vuelos, como en alojamientos y coches de alquiler, muestraa siempre las opciones más baratas y las ofertas de última hora que pueda haber, por lo que la información está siempre totalmente actualizada. Info: www.jetcost.es, www.skyskanner.es, www.tripadvisor.es, www.lastminute.es.

Si quieres viajar a Europa del Este, la compañía Wizz Air es la mayor línea aérea de bajo coste especializada en ese mercado. Wizz Air vuela en España desde Madrid, Barcelona, Girona, Zaragoza, Málaga, Alicante, Valencia, Palma de Mallorca y, desde hace poco también Tenerife Sur, a distintas ciudades de Hungría, Bulgaria, Rumania, Polonia, Ucrania, República Checa, Letonia y Lituania. Por ejemplo, se puede volar a Budapest a partir de 45 euros ida y vuelta desde varias ciudades españolas. También a Riga, Vilnius, Varsovia, Bucarest, Skopje o Sofía, entre otras capitales, desde 54 euros ida y vuelta. Además propone los bonos regalo, que permite a familiares seleccionar el destino que elijan o disfrutar aún más de una gran experiencia canjeándolos por algún servicio adicional de la amplia gama que ofrecen. Los bonos de 25 y 50 euros disponibles pueden utilizarse con vuelos y servicios para más de 95 destinos de 35 países. Basta hacer clic en un botón de su web para recibir estos bonos regalo por correo electrónico con tu propio mensaje personalizado.

*  AngelaGonzaloM es miembro de la Federación de Periodistas y Escritores de Turismo (FEPET)