Educación para el día mundial de los bosques
- En España los bosques siguen creciendo y alcanzan los 18,46 millones de hectáreas, lo que supone el 36,5% de la superficie nacional.
- Las plantaciones con especies arbóreas de crecimiento rápido alcanzan casi el 8% de los bosques y producen el 80% de la madera que se corta anualmente en España.
- Con el lema de este año “Los Bosques y la Educación”, se pretende dar a conocer la presencia cotidiana de los bosques, tanto en sus productos como la madera, como en los servicios ambientales: sumidero de carbono (36,8 millones de t de CO2eq), regulación hídrica, o mejora de la calidad de las aguas
La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó en 2012 la fecha del 21 de marzo como Día Internacional de los Bosques, para recordar su importancia y llamar la atención sobre la necesidad de mantener el patrimonio forestal mundial, la contribución ambiental de los bosques y su papel en la bioeconomía. Son los ecosistemas más diversos de la Tierra y poseen la gran mayoría de las especies terrestres del mundo. Están repletos de vida.
Cuando bebemos un vaso de agua, escribimos en un cuaderno, tomamos medicamentos para la fiebre o construimos una casa, no siempre relacionamos estas acciones con los bosques. Sin embargo, estos y muchos otros aspectos de nuestras vidas están vinculados a los bosques de una manera u otra.
Cada 21 de marzo, las Naciones Unidas rinden homenaje a la importancia de todos los tipos de bosques e intenta generar una mayor conciencia al respecto. Este año, el Día Internacional de los Bosques destaca la educación como un medio indispensable para aprender a amar el bosque, y apunta a su importancia para lograr una gestión sostenible de las zonas forestales y avanzar en la conservación de la biodiversidad. Los bosques sanos ayudan a crear comunidades fuertes y resilientes y aumentan la prosperidad de sus economías.
Conocer nuestros bosques y mantenerlos sanos es fundamental para el futuro. Los bosques serán más importantes que nunca a medida que la población mundial aumente hasta los 8500 millones de personas para 2030.
Enseñar a los niños a establecer contacto directo con la naturaleza ayuda a que las futuras generaciones sean conscientes de los beneficios que brindan los árboles y los bosques, y de la necesidad de gestionarlos de manera sostenible.
Además deconocer y comprender la naturaleza, las personas que trabajan en los bosques deben aprender a utilizar la tecnología para garantizar que nuestros bosques sean vigilados y administrados de forma sostenible.
Los países pueden contribuir a garantizar la colaboración entre científicos, políticos, agentes forestales y comunidades locales para que trabajen juntos en la lucha contra la deforestación y hacia la restauración de los paisajes degradados.
La igualdad de género en la formación forestal ayuda a la capacitación de las mujeres en zonas rurales para que puedan gestionar los bosques de manera sostenible.
Los bosques en España
En España los bosques siguen creciendo y alcanzan los 18,46 millones de hectáreas, lo que supone el 36,5% de la superficie nacional. La formación arbolada que se extiende por mayor superficie, el 28%, son los pinares con sus siete especies autóctonas, seguida de los encinares con un 14.21%, si bien la siguiente son las formaciones adehesadas, muchas de ellas encinares y alcornocales o en mezcla, que representan el 15%. Le siguen las formaciones de robles y quejigos con un 8,26% y un 8% las plantaciones con especies de crecimiento rápido.
Además, el 80% de los Espacios Naturales Protegidos son terrenos forestales y siete millones de ha de bosques están incluidos en el Catálogo de Montes de Utilidad Pública.
Estos datos se recogen en el Mapa Forestal de España y en el Inventario Forestal Nacional, que elabora el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, publicaciones que cuentan ya con más de 50 años, y en las que se da a conocer la evolución y el estado de los bosques. En ellas, y junto con otras operaciones estadísticas, se informa de su estado de conservación como hábitat de múltiples especies, de su efecto sumidero de carbono, de su fundamental función protectora y formadora de suelo y de su capacidad de regulación hídrica.
También se plasma su cualidad de mejorar la calidad de las aguas que llegan a los embalses y fluyen por los ríos, así como de los múltiples recursos para una bioeconomía responsable con el cuidado del planeta: madera con sus múltiples usos incluidos los energéticos, corcho, pastos para la ganadería extensiva, caza, frutos, hongos y setas o resina.
En el marco del Inventario Forestal Nacional y el Mapa Forestal de España, se ha desarrollado un estudio de las especies de crecimiento rápido para la producción de madera, claves para la industria forestal de la pasta y el papel, del tablero, biomasa para uso energético y madera de sierra.
Conforme los últimos datos, las plantaciones con especies arbóreas de crecimiento rápido alcanzan casi el 8% de los bosques y producen el 80% de la madera que se corta anualmente en España. Así, de media en España los bosques crecen anualmente 46 millones de m3, de los que se aprovechan 16 millones de m3 de madera.
Esta producción es fundamental para mejorar la balanza comercial en el sector forestal incluida su industria asociada. Con datos consolidados en 2017 las exportaciones del sector forestal (madera y derivados, pasta, papel y corcho) alcanzaron los 5.877 millones de euros superando a las importaciones en 200 millones de euros.
Los bosques y la educación
Este año, con el lema “Los Bosques y la Educación”, se pretende dar a conocer y resaltar la presencia cotidiana de los bosques en nuestras vidas, tanto en sus productos como la madera y sus múltiples derivados como en los servicios ambientales que nos prestan: sumidero de carbono (36,8 millones de t de CO2eq), regulación hídrica, mejora de la calidad de las aguas, protección de suelo y conservación de la biodiversidad.
El Día Internacional de los Bosques es también un llamamiento a la preservación del patrimonio forestal y a la gestión sostenible de estos bosques. En España, junto con el resto de países de la Unión Europea, se controla que la madera comercializada en la UE sea de origen legal aplicando el reglamento europeo de la madera (EUTR) y se colabora con países productores de madera, para que mejoren su gobernanza y gestión sostenible de sus bosques a través de los acuerdos regulados por el reglamento FLEGT.
Junto a las comunidades autónomas, se desarrolla una política forestal acorde con los principios internacionales de gestión forestal sostenible, como la mejor herramienta para prevenir incendios y plagas, así como apoyando las labores de extinción cuando las comunidades autónomas requieren el refuerzo de medios del Estado, tanto aéreos como terrestres a través de las BRIF.
Además se realizan trabajos de restauración de zonas incendiadas y se innova a través de programas de conservación y mejora de recursos genéticos forestales, para disponer del mejor conocimiento sobre las especies forestales y para asegurar la restauración de los bosques y su adaptación a nuevas condiciones climáticas.
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